viernes, 26 de julio de 2013

Ojo Por ojo

Todo cuanto hagas, tarde o temprano se te regresará, equivalentemente... ese es el equilibrio del universo.
El día era normal en las provincias de Inglaterra, todo muy normal, o eso parecía. No todo es lo que creemos que es. En un hogar, una casa muy grande, vive una familia no muy numerosa; una jefa del hogar, Marianne, de 60 años, una joven hija, Juliet, de 18, y su hermana Jazmín, de 22. La madre es la típica persona que a la vista de todos es refinada, tierna y amable, pero en la oscuridad del hogar, ella maltrata a sus hijas cruelmente, exigiéndoles casarse con cualquier hombre que les de dinero y posición en este mundo, cosa que ninguna de las dos quería. Marianne harta de esto, le consiguió un matrimonio arreglado a Jazmín, con un hombre empresario y aristocrático. Jazmín se negó, pero Marianne la obligó. Cansada de eso, Juliet salió de su casa, sin rumbo, huyendo de su realidad.

Camino hasta la gran ciudad de Manchester, y ahí en el pueblo buscó su supervivencia. Camino por el mercado del pueblo, y ahí intentó tomar una manzana de un puesto de fruta cuando el encargado no la veía, pero en eso sintió un escalofrió inquietante, se dio la vuelta y vio en la sobras un ojo rojo, perteneciente a un señor algo extravagante. Le observaba sin parpadear, y su mirada era sumamente penetrante, e hipnotizarte, sin darme cuenta ya estaba enfrente de él en su pequeño puesto de artículos variados. El hombre fríamente recitó:

"Puedo ver que tienes problemas, pero no temas, sin más, aquí estoy a tu servicio. Solo una cosa te pido, ojo por ojo será, lo mismo que me pidas, lo mismo me darás"

Juliet estaba hipnotizada por su extraño canto, pero a la vez estaba preocupada por su hermana Jazmín, que estaba a punto de casarse con un hombre que no amaba, así que le dijo al hombre simplemente: "Salva a mi hermana, no importa cómo, pero ayúdala"

El hombre simplemente sonrió, y en un parpadeo este desapareció entre las sombras. Juliet se le hizo extraño eso, así que sin más volvió a prisa a su pueblo. Le tomó dos días regresar, y al hacerlo el ambiente lucía lúgubre. Había un sepelio al parecer adentro, ya que había muchas personas de negro. Jazmín recibió a Juliet con un abrazó y lágrimas en los ojos, y le dijo: "Mamá ha muerto, fue asesinada ayer en la noche". Juliet sin creerlo corrió hacia el ataúd y la vio, pálida, los embalsamadores no pudieron quitarle las marcas de garras en sus brazos, y en su frente el número tres, que nadie se explicaba que significaba, pero Juliet no pasó atención en eso, solo podía pensar en las palabras de aquel hombre: "...ojo por ojo será, lo mismo que me pidas, lo mismo me darás"

lunes, 22 de julio de 2013

Solo en casa

Estas solo en casa, cuando de repente en las noticias empiezan a hablar de un asesino serial que se acaba de escapar de la carcel. Ves para afuera de tu casa, atravez de las puertas dezlisables de tu patio, y te das cuenta de que hay un hombre ahi parado, que ademas comienza a sonreirte.

Este sujeto comparte las mismas caracteristicas que el asesino descrito en la television. Dejas de mirarlo para tomar del telefono y rapidamente llamas al 911. Para cuando volteas a verlo, te das cuenta de que esta mas cerca.

Es entonces cuando sueltas el telefono y entras en estado de shock; no hay huellas en la nieve.
Images

Final Fantasy VII: Cloud Terror

Un día de esos, navegando un rato por Internet sin hacer nada útil o divertido, decidí bajar algún juego para pasar el rato.
Miré hacia la parte inferior de mi escritorio, allí se encontraba mi vieja y no funcional PSX.
Sentí algo de nostalgia por ella, así que decidí bajar un emulador, listo y configurado, me faltaban los juegos, debido a que los presté todos a un amigo que adquirió una psx.
Asi que, comenzé con bajar mi juego favorito de PSX, el bien conocido Final Fantasy VII.
Asi que, fuí a mi sitio común de torrents y baje el primero de la lista con el Utorrent.

Había una extraña peculiaridad en el archivo, generalmente los torrents no suelen pasar de unos cuantos kilobytes, y cuando los abres con el utorrent comienza a bajar el archivo pesado, pero esto era a la inversa, el archivo torrent pesaba unos 700 mb (El maximo de capacidad de un CD)
No recuerdo muy bien cuanto pesaba el CD1.

Aún más extraño, cuando lo puse a bajar esperando que fuese un error casual del chrome nada mas, el archivo se bajó al instante como si pesase 1 kb.
Le di a las propiedades del archivo, pero un error con extraños caracteres se abrió, parpadeo 2 segundos, y mi pc se reinició.
Extrañado, esperé a que todo se cargara y abri la carpeta de descargas del Utorrent, y vi que el archivo que baje ya no era un ISO, si no un archivo de un formato, desconocido.

".trr"

Intenté abrir el chrome para investigar un poco, pero en cuanto lo abrí se cerró con un mensaje de error parpadeante, todos, absolutamente TODOS los exe pasaron a ser del formato ".trr", miré todas las carpetas que usaba frecuentemente todos sus archivos, y no solo los exe eran ".trr", si no que cada archivo de musica e imagen se había tranformado en ese formato.
Volví a la carpeta del Utorrent para borrar ese archivo, pero el clic derecho no funcionaba.

Luego, volví al escritorio, y respiré para calmar mis nervios, pero vi algo...
El emulador de PSX seguía siendo un exe.
Así que por un instinto lo abrí, para mi horror, la selección de formatos solo daba la opción de ".trr", asi que busqué el FF7, y lo cargué, me tiró a pantalla completa.
La pantalla parapadeo en blanco y negro, cosa que jamas pasó en mi psx.

Un chillido agudo atravesó mis tímpanos como una bala dirigida a mi oreja.

Una imagen de Aeris siendo atravesada por la espada de Sephiroth flasheó por unos segundos para mi sobresalto, luego comenzó un slideshow a toda velocidad de imagenes que no pude distinguir, casi todas eran en blanco y negro, pero siempre destacaba algo rojo en ellas, al final de ese slideshow, la imagen de un cuerpo putrido sumergido en el llenó la pantalla y un tremendo grito
Salió por las bocinas, apreté escape para salir del juego, pero fue inutil, no respondía, presioné para reiniciar, apagar y demas, pero el grito se hacía mas y mas fuerte a medida que apretaba cualquier botón .
Finalmente, el texto "TRR" se incrustó en una pantalla negra y se desvaneció.

Sin el clásico tema de titulo, el menú de selección de nuevo juego y continuar apareció frente a mi, con mi corazón apunto de salir como un cohete de mi boca, presioné "nuevo juego".
Pero no, no, no, me tiró al menu de cargar partida, ahi aparecía una partida, en la que aparecía solo Cloud, pero su retrato era diferente, parecía estar de espaldas, mirando hacia una pared la cual parecía estar iluminada por algo, y salpicada de sangre, también parecía girar un poco la cabeza hacia la pantalla mirándome con un ojo rojo y una boca inexpresiva.

Cargué la partida.

Cloud apareció en la pantalla, parecía flotar en un lugar totalmente psicodelico mientras una notas tristes de piano sonaban al fondo, si, era igual a ese lugar donde estaba con Tifa antes de recuperar sus verdaderos recuerdos sobre los hechos de Nibelheim y Zack, pero se veía mas realista, como si el fondo no fuese prendereado, como un FMV, los colores eran mas fuertes y el escenario parecía girar lentamente.

La pantalla parpadeó, y el tema de batalla sonó.

La pantalla de batalla clásica de FF7 apareció frente a mi, lo que ví, me dejo pasmado...

La batalla en cuestión era contra Aeris, Cloud parecía estar encorvado, y manchado de sangre con sus ojos rojos y con la espada de la misma manera que su cuerpo, con sangre.
Aterrorizado yo también, apreté los botones para huir, pero bajaba mi hp, así que decidí atacar, el brazo de Aeris voló por los aires chorreando sangre, y la cámara se enfocó en su cara la cual se fue deformando, sus ojos comenzaron a caerse, y tambien sus dientes, ya me estaba volviendo loco, era demasiado....el miedo se posó sobre mi como un velo, o mas bien como una mortaja.

"BASTA!" gritó Cloud, perdí el control sobre el, y su barra de limite se llenó al instante, y automaticamente ejecutó un limite que no recordaba del juego, se llamaba "Desgarro".
Cloud se lanzó hacia Aeris y comenzó a descuartizarla a espadazos, mientras ella se reía diabolicamente, mas y mas fuerte...y de una manera totalmente psicotica, Cloud parecía gritar de dolor, pero sonreír a la vez.

El escenario comenzó a parpadear, y desapareció todo, una imagen de un niño rubio llorando en un cuarto oscuro apareció en el, lo sabía, sabía que algo malo podía pasar.... monitor, el niño su fue acercando tapandose la cara mientras lloraba.
Cuando se acercó a la cámara, sacó la mano de su cara, la cual estaba llena de sangre, el chico no tenía ojos, yo estaba totalmente aterrado....estaba al borde de salir corriendo, todo era demasiado surrealista para ser cierto...
El niño sonrió, y gritó, no solo eso, comenzó a azotar la "camara" con algo afilado y comenzó a salpicar sangre por todas partes.

Todo se distorsionó.

La pantalla ahora se enfocó en Cloud, parecía sacar algo del agua, la pantalla se enfocó en aquello...

Ropas rosas....era Aeris, su cadáver putrefacto..., Cloud lloraba, mares de lagrimas.
Todo el escenario se desintegró como el viento hace volar la arena.
El niño rubio apareció frente a la pantalla y dijo:

"¿Los errores del pasado ya son su infierno, no es asi?"

La musica de batalla sonó de nuevo, solo que ahora era mas aguda, Cloud apareció en el campo de batalla solo, los comandos eran todos lo mismo:

"Trr"

A leer esas tres letras de nuevo mi mente colapsó, y comenzé a golpear el botón de reinicio como loco, pero no, la Pc parecía estar poseída.

Al quinto botonazo, el comando de ataque "Trr" se eligió solo....

El niño se rió psicoticamente y comenzó a chorrear sangre por todo su cuerpo, comencé a llorar, pero mi cuerpo no se movía de la silla, y mis fuerzas en los brazos ya no tenían utilidad.

"Trr" escrito con letras rojas apareció en la pantalla....

Las 3 letras se separaron y una "E" una "O" y una "R", rellenaron los espacios vacíos.

"TERROR"

La pantalla parpadeó , y la sangre comenzó a ser salpicada en toda la pantalla....

Cloud estaba descuartizado....

El niño, chorreando sangre, se acercó a la pantalla....

"Y tu....escapaste de tus errores?"

Lanzé el monitor contra la pared....y luego la torre, ambos chispearon y comenzaron a quemarse.

"Podrás quemar mi corazón y mi rostro, pero jamas quemarás tus errores.............."

Me desmayé, y desperté en el hospital a los tres días.

Nadie sabia nada de mi computadora...actuaban como si no existiese.

Trr.....

sábado, 20 de julio de 2013

Mi Amigo Slenderman

Lo que les contaré es una experiencia real que tuve a los once años de edad, hace ya siete años. Hoy día la verdad es que me cuesta discernir si fue una fantasía o si realmente lo que viví todos esos años fue real. Hace poco encontré el diario de vida que me acompañó en mi niñez, y recordé bastantes cosas.
Desde que tengo memoria he vivido entre lo paranormal. La primera casa a la que llegué a los pocos días de vida, tras el divorcio de mis padres, tenía casos poltergeist. Más tarde fui a vivir con mis abuelos a una gran casa rústica, en la cual sí que pasaban cosas extrañas todos los días. No recuerdo bien, pero según mi hermano y mi prima cada medianoche salía corriendo de mi habitación porque una muñeca quería matarme con un cuchillo (supongo que eso gatilló mi fobia a las muñecas). Aún no olvido el día en que al caminar por el piso de la sala de estar encontramos las osamentas de un bebé.
Cuando me fui de allí a otra cuidad a vivir con mi hermano y mi madre, las cosas fueron peores. Nuevamente una casa tan grande como antigua, pero con un buen historial de muertes. Tenía alrededor de ocho años y comencé a escribir un diario de vida para registrar las cosas extrañas que me sucedían, desde ver a personas detrás de mí en los espejos hasta ver muñecas abrir solas los ojos. Tal era el miedo que le teníamos a la casa, que mi mamá decidió que era hora de una casa nueva, pero en todo sentido de la palabra. Estaba emocionada por ya no tener que sentir miedo en mi propia casa; sin embargo, eso no sería tan fácil.
No recuerdo mucho de esa época, y no sé por qué no logro recordar todo como debiera, pues cosas como ésas no se olvidan. Ahora es cuando el título tiene sentido. Primero fueron ruidos extraños, después cosas pequeñas moviéndose, pero aquello no era gran cosa comparado con lo que había vivido toda mi vida, así que para mí ya era normal. Me comenzó a parecer extraño cuando me sentí observada en todo momento. Un día miré la oscuridad y me pareció ver el largo y delgado brazo de alguien sentado en la mesa del comedor. Empecé a usar el diario otra vez. Escribí en varias ocasiones cómo sentía que una presencia masculina estaba conmigo, que no me daba miedo pero que me hacía sentir extraña, aunque a veces sentía que me protegía. Una noche mientras dormía desperté de la nada, sentía que hacía frío. Al mirar a techo vi algo deforme mirándome, era un verdadero monstruo con garras y una lengua larga, totalmente negro y robusto; era como si me mirara con odio. Mi única reacción fue taparme con el cobertor y no quitarlo hasta una hora después cuando ya no lo vi, y me sentí protegida por algo en la habitación. Estaba segura de que mi “amigo” lo había ahuyentado, según leí. Ahora sólo recuerdo al monstruo.
La última vez que lo sentí fue también el último día en que lo vi, o mejor dicho, en que se dejó ver. Miraba televisión acostada en el sillón y de pronto me sentí triste, junto con un impulso enorme de revisar mi habitación. Allí, en la esquina, se encontraba un hombre tan alto que tenía que encorvarse, demasiado delgado, usando un sombrero de copa. Vi que tenía cabello negro y vestía con ropa formal. Sin duda lo que más me llamó la atención era el que tuviera la piel literalmente blanca, que no tuviera rostro, y el hecho de que sus brazos fueran tan largos. Estaba de perfil mirando hacia la muralla. Sentí miedo, pero no pavor, y no me sentí amenazada. Me vino a la mente que se estaba despidiendo, y estaba segura de que evitaba mi mirada, que por tener que irse estaba triste. Sólo logro recordar ese momento. Según mi diario no lo volví a ver, siento pena por ello, y más aún porque desde ese día le empecé a decir “amigo” e hice un dibujo de él y los fantasmas que había visto en las otras casas.
Cuando la leyenda de Slenderman llegó a mis oídos, y tras ver unas imágenes, recordé ese suceso, pensando que era un amigo imaginario, pero al leerlo en mi diario… ya no estoy segura. Ahora cada vez que veo un artículo sobre él un escalofrío me recorre la espalda, junto con un poco de miedo. Tengo la sensación de que hay algo que no logro recordar, pero no sé qué es exactamente, y al pensar en mi “amigo” viene a mí un sentimiento de desconfianza. ¿Qué habrá pasado realmente? Ya no siento cosas raras, pero al encontrar el diario me sentí muy extraña. ¿Ustedes qué opinan…?

'Teatro de Terror'

Jaime estaba en la primer fila del teatro, y sin darse cuenta era observado.
Concluida la obra, iba rumbo a la salida, y al mirar a un costado, vio a una muchacha que
le sonreía. La muchacha era tan hermosa, que lo hizo dudar si la sonrisa era para él. Primero
miró si detrás había alguien, después devolvió la sonrisa.
La muchacha tenía puesto un vestido antiguo, con un revelador escote. Era lógico suponer
que era una actriz, y que aún llevaba el vestuario de una obra anterior. La muchacha se le
acercó y saludó:

- ¡Hola! Veo que te gusta el teatro.
- ¡Hola! Sí, me gusta muchísimo, soy un fanático y todo… - dijo Jaime. En realidad era la
primera vez que veía una obra, y le habían regalado la entrada.
- ¿Te gustaría ver el teatro por dentro?
- Claro, ¡me encantaría! - respondió Jaime.

El teatro ya estaba casi vacío. Tras entrar a un corredor, pararon frente a un camerino.

- Este es mi camerino - dijo la muchacha -, si me esperas un rato te muestro lo demás.
- Bueno, te espero aquí mismo.
- No demoro.
- No tengo apuro.

La muchacha, tras una nueva sonrisa, cerró la puerta del camerino.
“Ese vestido será falso, pero aquellas no son de cotillón” pensaba Jaime mientras se restregaba
las manos.
Esperaba ansioso frente a la puerta. Al prestar más atención al corredor - antes su vista estaba
fija en el escote - le pareció que el lugar era bastante lúgubre, y al ver que alguien se le acercaba
por el corredor, sufrió una fuerte impresión debido a su apariencia, y retrocedió dos pasos.
Aparentemente era un hombre, pero su cabeza era muy pequeña, al acercarse más, Jaime
vio que era la cabeza de un muñeco, de esos que usan los ventrílocuos.
El hombre cabeza de muñeco, pasó frente a él y saludó con la mano, mirándole a los ojos;
después dobló rumbo a la pared y la atravesó, desapareciendo.

Si su corazón hubiera latido un poco más fuerte, seguramente hubiera muerto de terror, como
le ha sucedido a muchos, pero la juventud de Jaime lo salvó.
Estaba recuperando su ritmo cardíaco, cuando una voz le hizo dar un salto.

- ¿Qué está haciendo ahí?

Al voltear vio que era un hombre normal, con cabeza humana.

- Estoy, estoy esperando a una actriz, está en el camerino - le contestó Jaime.
- Esta parte del teatro no se usa - dijo el hombre, y procedió a abrir la puerta para demostrarlo.

Efectivamente el camerino estaba vacío, lleno de telas de araña y polvo.

Sobre el puente

Regresábamos de acampar, y caminando por la vía del tren llegamos al puente cuando ya era noche.
Éramos cuatro amigos, y esa era una de las tantas salidas que habíamos hecho juntos.
Una luna redonda alumbraba los durmientes y las piedras. A unos cuantos metros del puente ya se escuchaba el rumor del agua que corría allá abajo. Aquel puente está construido sólo para que pase el tren. No tiene barandas donde agarrarse, y entre los durmientes está el vacío; una caía de al menos treinta metros. Allá abajo el agua corre veloz entre enmarañados sarandíes y sauces que se inclinan hacia el arroyo. En los costados, como a dos metros de los rieles, hay dos gruesas vigas que son parte de la estructura que sostiene al puente.

Mis amigos comenzaron a cruzarlo, yo quedé atrás, atándome los cordones. Los durmientes se veían perfectamente, y la oscuridad que había abajo ayudaba a no marearse; peor era cruzar durante el día, pues es inevitable mirar hacia abajo porque hay que caminar por los durmientes, y como ya dije, entre ellos no hay nada.
Comencé el peligroso cruce bastante confiado, mis amigos iban adelante, en silencio, concentrados en cada paso. Había avanzado un buen trecho cuando me di cuenta que los durmientes estaban mojados por el rocío de la noche, lo que los hacía algo resbalosos. No sé cuantos años tienen aquellas maderas;
algunas crujían al pisarlas, tal vez sólo era una impresión falsa, pero me parecía que se cedían, que se hundían algo bajo mi peso, como si fueran a colapsar en cualquier momento.

Por la mitad del puente, el pie que tenía apoyado resbaló, cuando el otro aún no había alcanzado el durmiente. Caí pero tuve la suerte de hacerlo hacia adelante, por lo que pude aferrarme a un durmiente, mis piernas quedaron colgando en el vacío. Grité, mis amigos se volvieron y enseguida fueron a rescatarme. En ese momento fue cuando experimenté el verdadero terror, no por estar cerca de la muerte, sino porque algo me agarró de los tobillos.
Usaba medias cortas y además debían estar bajas, porque sentí el contacto de dos manos sobre mi piel.
Eran manos frías y grandes, pues me rodeaban todo el tobillo.
Arriesgando su vida mis amigos consiguieron subirme. Sentí el agarre de aquellas manos hasta que me subieron. El resto del puente lo cruzamos juntos.

Aquellos segundos, aquellos instantes que se hicieron largos para mí, fueron lo más aterrador que he vivido. De lo que no estoy seguro, es de que si lo que me agarró los tobillos era algo maligno, porque en ningún momento me jaló hacia abajo.

Rumores

Hola amigos del blog siempre han existido los rumores eso que hablan de algo o alguien puede ser verdad o mentira , pero la mayoría de las veces es falso , los rumores son rumores algunas veces dan ganas que sea verdad , algunas veces quieres que sea mentira , en esta oportunidad quiero que sea verdad miraran la imagen y verán una talentosa imagen hecha de una supuesta película de Jeff The Killer diera fuera verdad porque seria una película épica , muchos de mis seguidores dicen que es falso pero dejemos las opiniones , pero hay que admitir que seria muy bueno y grandioso , incluido me atrevo a decir que seria una joya de las películas de terror. ya se que en este post esperaban una creepypasta , leyenda , descargar de juego de terror pero bueno solo era una opinión sobre los rumores

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Era un chico con mucha suerte, eso pensé siempre. Y mírame ahora… no creo que sea capaz de aguantar mucho más aquí. Espero que esto funcione.

Yo era un muchacho de familia rica. No tenía hermanos, pero nunca me apenó ser hijo único. Nací a mediados de los ochenta y me crié en una gran casa ubicada en las afueras de la capital. Aunque no tengo muchos recuerdos sobre aquel lugar, puedo decir que era una inmensa casa amarilla, muy llamativa y con unos detalles más que cuidados. Mi padre era director general de una empresa arquitectónica (cosa que explica el porqué de aquella gran casa). Siempre estaba de viaje. Pero esta no era la típica historia del padre rico que no quiere a su hijo. Él me tenía mucho aprecio, siempre hablábamos por teléfono, además de que todos mis recuerdos sobre sus visitas a casa son grandes momentos de mi infancia. Nunca estuvimos muy unidos, pero éramos almas gemelas, sin duda. Con mi madre tampoco pasé demasiado tiempo, y la recuerdo como una persona más fría, aunque claro, fui su hijo y su relación conmigo estaba a un nivel distinto que al de cualquier relación que pudiese tener con otra persona.

Pronto acabé mis estudios básicos y llegó el momento de elegir qué hacer con mi vida. Realmente nunca me había planteado a qué me quería dedicar, ni qué haría al acabar mis estudios. El plan por defecto siempre había sido seguir los pasos de mi padre y elegir hacer una carrera de arquitectura o ingeniería. Me gustaba la idea, pero en el fondo sabía que no quería ser como mi padre, y probablemente eso fue lo que me detenía.

Fue en verano cuando pasó todo. Por aquel entonces pasaba mucho tiempo en mi ordenador, sobre todo durante las aburridas noches en las que no sabía qué hacer. Internet aún era algo muy nuevo y desconocido para la mayoría, cosa que ayudó a que explorar y participar en blogs y foros se convirtiese en mi nuevo y nocturno pasatiempo secreto.

Todas las noches navegaba sin rumbo fijo por la red, descubriendo e interesándome por todas las cosas interesantes que encontraba. Una de las noches me llamó mucho la atención una página. Era un fondo negro, con una historia escrita en blanco encima. Los tamaños de la letra variaban y la letra estaba hecha a ordenador, pero no parecía un formato normal. La barra de direcciones había desaparecido, aunque no le hice caso, puesto que no sabía nada de informática y no le di importancia al suceso.

Era tarde y no me quedaban demasiadas ganas de seguir explorando por la red, pero aquello parecía interesante, así que me autoconvencí a leer la historia. La historia estaba titulada “Siguiente”. El principio no tenía sentido y me dio muy malas vibraciones, pero seguí leyendo. Contaba la historia de una persona, parecía una biografía ultra resumida. Llegó una parte en la que la historia perdió el sentido totalmente. En esa parte contaba que leyó una entrada titulada igual que la que yo leía. Luego, para colmar el sin sentido de aquel texto, al final de la historia sólo ponía “Ahora, yo volveré a mi vida. Y tú, dejarás la tuya…”. Tras leer aquello apagué el ordenador y me fui a dormir enfadado, por la pérdida de tiempo que había sido aquella historia. La verdad es que estaba muerto de sueño, pero me costó dormirme.

A la mañana siguiente me desperté en una sala blanca. Sobresaltado, intenté levantarme y ver qué pasaba, qué era aquello, pero no tuve fuerzas para hacerlo. Examiné rápido mi alrededor y, con incredulidad y miedo, me di cuenta de que era una habitación de hospital. Unos segundos después una enfermera apareció para ver qué pasaba. Atónita de verme despierto, me dijo que esperase y fue a llamar lo más rápido que pudo a un médico. Al llegar el médico, intenté preguntar qué me había pasado, y explicarle que lo último que recordaba era que pasé la noche en mi ordenador. El médico, casi más sorprendido que yo y con la cara sumamente pálida, me explicó que había despertado de un coma. Que llevaba alrededor de diez años allí. Me desmayé.

Volví a despertar, ahora en una sala distinta, con una mujer sentada a mi lado. Era mi tía. Me contó que mis padres habían muerto, y que nadie aún se creía que hubiese despertado. También me ofreció quedarme con ella hasta que supiese qué hacer.

No me creía nada de lo que estaba pasando. Tardé varios días en asimilar la situación y en empezar a creérmela. Estaba solo en el mundo, todo era nuevo y desconocido para mí. No sabía qué hacer. Entonces, recordé algo. Recordé aquella historia que había leído el último día de mi “sueño”. Recordé la última parte. Lo entendí todo…

Perdido y asustado, utilicé el ordenador que había en casa de mi tía para relatar una historia lo más fiel y parecida a la que recordaba, para así, condenar al siguiente… Y acabar con esto.

Ahora, yo volveré a mi vida. Y tú, dejarás la tuya.

viernes, 19 de julio de 2013

La criatura de ojos tristes

“En ese momento, pensó, que hubiera sido mil veces mejor estar loco, que todo lo que sucedió fuera parte de su imaginación. Pero no era así, todo era real y estaba a punto de ponerse peor.”

Era una noche de insomnio, usual como cualquier otra, – ya que llevaba un par de semanas así – al menos eso es lo que pensaba Paul. Como es normal en partes del año, Paul, por estudiar hasta altas horas de la noche en semanas de exámenes, perdía sus horarios habituales de sueño. Por lo cual a finales de semestre sufría de insomnio, pero nunca le produjo mayores problemas. Sin embargo esta madrugada de junio iba a ser diferente.

Paul sin saberlo, había elegido la peor noche para salir a la azotea de su edificio. Era un 23 de junio y con la llegada del invierno, a las 5:00 am, empezó a llover profusamente. Al estar Paul despierto, decidió subir a la azotea a disfrutar de la lluvia. El sabía que era muy inusual por lo demás, que un joven saliera a las 5 de la madrugada con bajas temperaturas solo a quedar empapado por las precipitaciones.

Cuando Paul se abrigó para subir, fue al baño y cuando estaba ahí sintió un ruido en la cocina, lo que lo hizo pensar que tal vez algo había caído porque estaba mal puesto, probablemente una cuchara o plato en el lava lozas. No le dio mayor importancia y acto seguido, se apronta a subir. Pronto a salir del departamento, siente Algo caer en la pieza principal y nuevamente no le dio importancia. Luego, olvida las llaves y vuelve a su habitación a buscarlas. Cuando entra a la habitación, prende la luz y junto a un nuevo sonido inusual en la pieza principal, se produce un corto circuito en el departamento y se quema la ampolleta, quedando a oscuras.

En estos momentos le comienza a inquietar un poco, pero intenta evitar sugestionarse, debido a que sabía que mientras más importancia le diera, peor serían las cosas. Sube el interruptor del automático, cambia la ampolleta y se apresura a disfrutar de la lluvia antes de que acabe. Finalmente Paul se encuentra en la azotea y disfruta de la situación, ya que por la hora que era, más la lluvia, la calma de la ciudad y la vista privilegiada de un edificio de 14 pisos, era según él pensaba, “majestuoso”.

Pasan algunos minutos y la lluvia comienza a disminuir, luego Paul comienza a mirar al edifico de en frente, ya que habían 4 edificios conexos. Cuando de repente ve algo que no debió ver, estuvo en el lugar donde no tenía que estar. En el edificio de en frente nota que hay un departamento vacío, sin cortinas y se veía todo en penumbras hacia adentro, pero aun así pudo distinguir algo en la habitación.

Es en ese momento cuando nota una silueta que le provoco el peor de los escalofríos que había sentido. Era una silueta increíblemente grande considerando el tamaño de la pieza. Dicha silueta de aspecto humano, estaba encorvada, a espaldas a Paul. Lo que veían sus ojos era perturbador, aparentemente lo que observaba estaba devorando algo, por la falta de luz en la habitación no distingue que podría ser y ante el pánico, queda pasmado, inmóvil. Pasaron pocos segundos y la criatura siente que algo lo observa, voltea bruscamente. En ese momento Paul experimenta la peor de las sensaciones.

En cosa de segundos se sintió lleno de terror, pánico, angustia y no podía creer lo que sus ojos veían. Nunca había observado algo tan horrendo y perturbador. Acto seguido, la criatura deja caer lo que tenía en lo que parecían ser sus manos que solo tenían púas y sale de la habitación apresuradamente.

Paul estaba en shock, pero se da cuenta que si no volvía a su hogar, esa cosa, podría ir tras él. Con esa sensación de angustia y horror, corrió lo más rápido que podía, pensando que algo lo seguía. Fueron los dos pisos más largos de su vida, corrió por el pasillo y todo era penumbras por la hora. Finalmente, jadeando llega a su departamento y entra en el. Sintiéndose a salvo por fin, se saca la chaqueta y la deja en el sofá.

Al estar en su habitación, aún no entiende, si lo que vio fue real o parte de su imaginación y de un salto despierta. Sudando y aliviado dice -Fue sólo una pesadilla-. Luego voltea en su cama y le vuelve el pavor, el sudor se vuelve helado, las palpitaciones al máximo y ve a la criatura agachada, sólo observándolo con su mirada triste y horrenda, su piel tenía la textura y aspecto de haberse quemado, tenía llagas en todo el cuerpo y dientes afilados en punta. Era extremadamente delgado, estaba en los huesos. Sus profundos ojos de color amarillo brillante, eran como los de un humano, pero con una expresión de dolor, de angustia eran lo más aterrador en esa cosa. Paul, nunca sintió tanto miedo y la criatura seguía observándolo impávido, Paul cierra sus ojos esperando que sea un mal sueño. Para suerte de él, nuevamente se siente un ruido en la habitación principal y como si fuera otra pesadilla, abre los ojos y la criatura ya no estaba. Mira el reloj y eran las 6:33, no sabía qué hacer, no sabía si era real lo que había experimentado. A esa temprana hora, el sol aún no salía, Paul se apresura y prende todo artefacto y luz posible en el departamento – como si eso fuera a darle protección – se sentía seguro.

Finalmente fue tanta la exaltación y se da cuenta que efectivamente había salido del departamento, ya que su abrigo estaba en el sofá, tal como lo había dejado al volver y estaba mojado aún, por la lluvia. Pasaban los minutos y Paul trataba de convencerse que todo era un sueño. Luego decide llamar a su hermana, a quien le tenía un cariño y confianza diferente al que suele tenerse entre hermanos. Su hermana contesta entre dormida por la hora y Paul intenta contarle lo que paso, pero estaba muy exaltado aún.

En eso que hablaba con Katherine – su hermana – se escucha interferencia en la llamada -cosa común para ambos porque el edifico tenía mala recepción- y definitivamente deja de escuchar la voz de su hermana. En eso, oye algún tipo de léxico que nunca había escuchado, Paul, pensaba que su hermana estaba intentando jugando una broma para quitarle seriedad a la situación, pero era la voz de algo que no era humano, no podía ser la voz de su hermana y se corta la llamada finalmente.

Paul pasmado, entra en pánico y su pavor aumenta cuando empieza a vibrar su teléfono. Era su madre, Paul contesta y escucha la voz desesperada y angustiada de su madre pidiéndole que por favor no lo hiciera, que pensara en su familia. Paul no entendía nada, ya que el no pensaba hacer nada, más que pedirle a algún pariente que lo visitara, o lo recibiera en su casa, para no estar sólo.

En eso Paul intenta tranquilizar a su madre, preguntarle a que se refiere, cuando su madre le dice – !Por favor Paul, no te suicides, tu hermana me dijo que la llamaste para decirle que te disculpáramos, que ya no aguantabas más y que te quitarías la vida, por favor no lo hagas! – Paul quedo pasmado, ya que no pudo decirle nada a su hermana y siente ganas de llorar, una angustia incontenible y al tratar de decirle a su madre que el no había alcanzado a hablar nada con Katherine, se corta el teléfono y siente una serie de golpes en la puerta de entrada, como si algo intentara entrar.

Paul estaba desesperado y ya estaba aceptando que algo malo iba a pasar, sólo decide rezar – comportamiento inusual de su parte, ya que Paul es ateo – luego del primer Padre nuestro, los golpes aumentan en intensidad y escucha que el vecino abre la puerta de su departamento, inmediatamente los golpes en la puerta de Paul cesan. Su vecino, llama a la puerta y pregunta si hay alguien, si está todo bien. Con eso Paul, siente seguridad abre la puerta y ahí estaba Carlos que pregunta – ¿qué paso? ¿Quién golpeaba la puerta así? ¿Eras tú? – Paul, cuando decide contarle lo sucedido, piensa que no le van a creer, se arrepiente y sólo dice, que había tenido un ataque de ira y estaba golpeando la puerta porque se había pegado en un pie, ya que estaba medio dormido. Finalmente Carlos se vuelve a su departamento y Paul cierra la puerta. Pasaron un par de horas y Paul ya se encontraba más tranquilo, las cosas estaban como de costumbre, como si nada hubiera pasado y logra quedarse dormido, ya que se sentía exhausto.

Al despertar, Paul mira su celular y nota que había dormido casi 24 horas, ya que eran las 5:00 am del día 24 de junio. Al ver la hora nota que tiene una gran cantidad de llamadas perdidas de sus padres y su hermana, además de algunos familiares y amigos. Paul pensó que se debían a su extraña conversación con su madre, la cual creía que Paul pensaba quitarse la vida, según la supuesta conversación que nunca tuvo con Katherine. Cuando Paul, decide rehacer su vida, y estudiar para los exámenes finales que tendría esa semana, siente que algo helado le agarra el pie y vuelven los escalofríos de Paul.

En ese momento, pensó, que hubiera sido mil veces mejor estar loco, que todo lo que sucedió fuera parte de su imaginación. Pero no era así, todo era real y estaba a punto de ponerse peor.

Era la criatura, estaba junto a su cama, encorvado como de costumbre y mientras agarra del pie de Paul, comienza a hablar en la lengua extraña -que había escuchado por teléfono el día anterior, cuando hablaba con Katherine -lógicamente, Paul no entendía nada.

Mientras luchaba por ser liberado, sólo esperaba que lo soltaran y se fuera como el día anterior. La criatura finalmente, en su mirada de dolor y angustia – que era lo más extraño y perturbador que tenía en su aspecto – lo mira fijamente y comienza a brotar sangre por sus ojos amarillos. Luego la criatura se levanta, y del pie que tenía agarrado a Paul, lo comienza a azotar contra el piso, era imposible zafarse ante semejante fuerza.

Finalmente la criatura lo arrastra de los pies, lo saca del departamento, por el pasillo hacia los ductos de basura – que hay en todos los pisos del edificio – comienzan a subir y llegan al último piso.

Paul, casi inconsciente por los golpes, queda indefenso, y se rinde ante la criatura. Finalmente luego de todo el sufrimiento y la tortura, el ser lo levanta del cuello, lo asfixia hasta su muerte y lo lanza de la azotea hacia el estacionamiento lateral del edificio.

Ante tal caída, el conserje de turno escucha el golpe, y se apresura a ver. Queda impactado, al ver el cuerpo inmóvil del joven. Inmediatamente piensa que fue un suicidio y lo reporta.

Su familia – que ante el miedo de que se quitara la vida y no recibir respuesta a las llamadas telefónicas – había decidió viajar hacia Santiago, para evitar una tragedia, que nunca estuvo planeada por Paul ciertamente. Lamentablemente, él nunca llego a contarle a nadie lo que había sucedido, por lo que al enterarse su familia del deceso de Paul, asumieron qué fue lo que temían, y no había nada por hacer. Nadie nunca supo, ni va a saber realmente, los horrendos últimos días de vida de Paul, quien murió por estar en el lugar y momento incorrecto.

Fue víctima de la criatura de los ojos tristes, sólo por ver lo que nunca debió haber visto.

Blind Maiden

Blind Maiden
Tal vez se trate solo de eso,de una nueva Leyenda Urbana,pero de no ser así, nos encontrariamos ante un suceso escalofriantemente desconcertante que nos llevaría,una vez más, a la terrible conclusión de que no existen límites ni fronteras para el horror.Un horror que se adapta camaleónicamente a los tiempos y se vale de todos sus eventos para manifestarse ante nosotros.
Son muchos los que cuentan haber entrado en una página web llamada www.blindmaiden.com(blind maiden significa doncella ciega).Normalmente,si pretendes acceder a ella,por más que lo intentes,tu explorador no te lo permitirá y aparecerá otras cosas ya que para hacerlo deberás cumplir tres condiciones.Encontrarte completamente solo,hacerlo exactamente en la medianoche de un dia sin luna y tener apagadas todas las luces de la casa.Entonces,solo entonces se te permitirá el acceso.Una vez dentro,enseguida tras un impactante viaje por las imágenes que ofrece,sin necesidad de que nadie te explique nada, comprenderás,como dice el eslogan de presentación de la página,que estarás ante 'una experiencia real de horror absoluto'.Tendrás que emplear tus cincos sentidos y poner especial cuidado en no clicquear,ni por error,el botón de 'Aceptar' en participar activamente en la experiencia.Si así lo hicieses seria tu fin y quedarías transformado en una imagen más del amplio archivo de incautos que,antes que tu,osaron,tal vez incrédulos,tal vez curiosos,a probar esta experiencia.Pero ¿que es lo que se supone que ocurre una vez que haces clic sobre aquel botón? Para tu sorpresa y horror observarás en tu monitor como una siniestra silueta se pasea... por tu propia casa!!! Querrás despertar de lo que desearás que sea una pesadilla cuando veas como ese espectro se acerca y entra en la misma habitación en la que te encuentras... te verás en tu monitor a ti mismo,de espaldas...entonces sentirás su presencia detrás de ti... te girarás no pudiéndolo soportar más y... lo último que verás,antes de morir,será el rostro de la doncella ciega que,despiadadamente te arrancará los ojos... Como he dicho al principio,a mi,no me consta que sea verdad,y sinceramente,no pienso comprobarlo...si,lo reconozco,me da mucho miedo...pero yo les paso el reto a ustedes.¿Te atreves a comprobarlo?¿Se trata de una Leyenda Urbana,un montaje?,o una terrible realidad...


Hasta ahí parece un mito mas de los tantos que hay dando vuelta.Pero sigamos...
A continuación un relato que anda dando vueltas por los foros paranormales:
Blind Maiden o la doncella ciega.. como la quieran llamar puede llegar a ser una leyenda urbana pero no, es real y yo casi sufro las consecuencias de ponerma de valiente con esas vainas.
la historia habla de que hay una pagina (vacation gifts maiden download music at www.blindmaiden.com  )a la cual solamente se puede ingresar si estas totalmente solo, con todas las luces de tu casa apagadas y exactamente a la media noche, despues de esto ni se te ocurra hacer clic donde dice aceptar el desafió porque al hacer esto morirás casi seguramente...
yo hice totalmente lo contrario y coloque aceptar y justo en ese momento todo lo que veía en la pantalla se volvió tan real.. vi una sombra caminando por un lugar que parecía ser mi casa y caminando hacia el lugar donde yo estaba, del miedo no podía mover un musculo, luego llego a la puerta y la empezo a abrir, justo en ese momento yo volteo y veo que la puerta se abre, y luego veo su rostro, era hermosisisisima indescriptible, pero no tenia ojos!!, luego se acercaba cada vez mas susurrando algo que no pude entender y su rostro cambio y se volvió horripilante y con una expresión de terror que jamas olvidare, salí corriendo con todo lo que pude y me tropecé con algo en el piso y me estrelle contra el borde de mi mesa de estudio y del golpe cai desmayado y parece que ella debio pensar que estaba muerto porque gracias a eso njo me paso nada a mi, yu jamas en toda mi vida volvere a jugar con lo sobrenatural y jamas volvere a subestimar sus poderes.......


Husmeando por ahí encontré algunos datos interesantes:
Como entrar a la pagina:
1.- 0 horas
2.- luces apagadas
3.- Solo Sin compañía
Pero falta un 4 paso mas
4.- Según otras paginas mencionan que de ve ser....Un Jueves 23
Otro dato que le tengo menos confianza que de lo del jueves 23 es que la pagina NO es:

www.blindmaiden.com

Si no que es:

www.blaindmadelaine.com






La Ayuda de un desconocido

Una mujer finalizó sus compras en unos grandes almacenes y cargada de bolsas se dirigió al aparcamiento donde tenía su vehículo. Al llegar se encontró con una de las ruedas de su coche pinchada, abrió su maletero y sacó la rueda de repuesto y las herramientas necesarias para realizar el cambio. Como no tenía mucha experiencia le estaba resultado complicado cambiar el neumático.
Un hombre muy guapo, vestido con traje y corbata y con un lujoso maletín de cuero se ofreció gentilmente a ayudarla, entre los dos cambiaron en pocos minutos la rueda del coche mientras conversaban. Ambos frecuentaban el centro comercial a la hora de la comida porque él trabajaba cerca, por lo que dijeron que si alguna vez volvían a coincidir quedarían para comer juntos. El hombre una vez que ganó confianza le pidió a la mujer si podía acercarle en coche a la otra planta del parking, ya que sin darse cuenta se había equivocado al bajar en el ascensor y tenía su coche aparcado en un piso superior, a ella no le supondría mucho porque tenía que pasar por allí para dirigirse a la salida.

La mujer no quería parecer ingrata y decirle al hombre que no, pero no estaba dispuesta a montar en su coche a alguien que apenas conocía; por lo que fingió haber olvidado una bolsa en una de las tiendas y le pidió al señor que la esperara un minuto mientras subía a recogerla. Cuando el hombre permaneció sentado en su coche esperando en lugar de subir con ella a la planta en la que supuestamente tenía el coche empezó a sospechar. Por lo que una vez dentro del centro comercial se dirigió a un miembro del equipo de seguridad para contarle el caso.

Al llegar ambos a su coche éste estaba vacío, pero el hombre en su huída (probablemente al ver al seguridad) olvidó su maletín en el asiento de atrás del coche. Tras diez minutos de espera el seguridad y la mujer llamaron a la policía para que se encargara de entregar el maletín a su propietario. Los agentes en busca de algún tipo de identificación abrieron el maletín, nadie podía esperar lo que encontraron dentro.

El maletín estaba lleno de distintos tipos de cuchillos, una cuerda, esparadrapo y una cámara de fotos. Lo que encontraron dentro de la memoria de la misma les dejó estupefactos.

El hombre secuestraba mujeres que torturaba y violaba antes de ejecutarlas, su fetiche era fotografiar a sus víctimas que al parecer eran muchas. Los agentes de inmediato le pidieron a la mujer que les mostrara la rueda que había cambiado el asesino. La rueda estaba perfectamente, tan solo encontraron un pequeño trozo de madera con el que al parecer había vaciado el aire de la misma obstruyendo la válvula de entrada de aire.
El asesino tras localizar una posible presa que se encontraba sola en el parking, vaciaba uno de los neumáticos y esperaba pacientemente a que regresara para ofrecerse a ayudarla y ganarse su confianza, de este modo ellas accedían a meterse con él en el coche donde las atacaba y secuestraba.


Los ojos del diablo

Hace 4 meses que no visitaba a mis padres. Sabía que me habían extrañado, pero ¿qué les digo? Soy un hombre ocupado. Era una tarde de noviembre, y hacia frio, porque llovió por la mañana, pero eso no es lo importante. Lo que más quería hacer en la casa de mis padres era abrazar a mi hermanita llamada Lucy. Ella era la razón de mi visita, ya que cumplía 7 años. Al llegar me encontré con mi mejor amigo de la secundaria, Ramón. El se graduó de la universidad y ahora tiene una esposa y están pensando en tener un hijo. Me dijo que últimamente mi hermanita se comportaba algo extraño. No sabía a qué se refería, pero no le preste atención a eso. Por fin entre a casa, el lugar donde empecé a gatear y luego a caminar. Mis padres estaban sentados en el sillón de la sala, yo obviamente los fui a saludar, y mi madre me dio un abrazo muy fuerte que me saco el aire, en cuanto a mi padre le di un apretón de manos y un abrazo. De inmediato le pregunte a mi madre donde estaba mi hermanita, y me dijo que en su habitación encerrada. Eso si me confundió, porque la última vez que la vi se la mantenía en el jardín jugando con sus muñecas, pero ¿porqué estaba en su cuarto en vez de celebrando su cumpleaños?
Fui a su habitación para saludarla y en cuanto entre me sentí frio, como si la habitación estuviera abandonada, y ahí estaba, en su cama jugando con un caballo de madera que le faltaban los ojos. La salude y ella me dio un beso, pero como si no fuera ella, como si lo hubiera hecho por deber, no por querer. Le pregunte porque le faltaban los ojos a su caballo, y no me dijo nada, seguía jugando con el mirándolo fijamente. En ese momento entendí a que se refería Ramón, pero no pensé que fuera tan extraño. Yo le había comprado un collar con forma de mariposa, porque a ella le gustaban mucho las mariposas. Lo saqué y se lo mostré, y luego, volvió en sí. Se emocionó mucho y me abrazo. Claro que me confundí más, pero no preste atención a eso. Bajamos a la cocina porque mamá había preparado un pastel de chocolate especial para ella. Tenía dibujada a rosita fresita con flores al lado. Al bajar algo raro paso. Ella volvió a ponerse “rara”, así que le pregunte qué ocurría, y ella dijo que no quería ese pastel, que no le gustaban sus ojos. Estaba aterrada, y yo confundido. Salió corriendo a su habitación de nuevo, y yo fui tras ella. Le pregunte que tenía, y porqué actuaba de esa manera. Entonces comenzó a llorar ya gritar. Aterrado, la tome y la lleve abajo. Le dije a mi madre que guardara el pastel. Estaba descontrolada y muy enojada. Le pedí que se calmara y que me mirara. Entonces vi unos ojos muy oscuros en ella, muy oscuros y aterradores. Pero después de un rato se calmo y esos ojos desaparecieron. Me sentía preocupado y exaltado, y hable con mis padres. Les pregunte porqué actuaba así, qué significaban esos ojos que tenía, y ellos solo callaron, pero yo insistí, hasta que mi madre cedió, mi padre le pidió callar, pero no lo hizo. Me conto que desde hace un tiempo un hombre muy extraño estaba hablando con ella cuando la fueron a recoger a la escuela, mi padre lo había ahuyentado, y mi hermanita estaba con la mirada perdida. Le pregunte a mi madre como era ese hombre, y me dijo que llevaba una gorra negra con un símbolo de una cruz hacia abajo. Mis padres no sabían que significaba eso, pero yo sí, ese símbolo es uno de los muchos satánicos. No sabía qué hacer o decir. Solo quería que mis padres hubieran tenido mucho más cuidado y que mi hermana hubiera huido de ese hombre. Le pregunte a Lucy que le había dicho ese hombre, pero estaba como en shock, no me decía nada, no quería decir nada. Así que les dije a mis padres que la llevaran a un psicólogo, porque esto no era nada normal, y obviamente que no era bueno.
Salí de la ciudad una semana con Ramón para ir de pesca al lago, y fui a ver a Lucy. Al llegar, la casa era un desastre, y se oían ruidos muy extraños que venían del cuarto de mis padres. Fui a ver que estaba ocurriendo. Entonces, el horror me invadió, estaban los dos tirados en el suelo, con sangre saliéndole de la boca y de las orejas, pero lo peor era que a ambos les faltaban los ojos, y en ese momento, me destrocé. Me caí en el pasillo y vomité sangre de dolor. De inmediato corrí a la habitación de Lucy. Pero ella solo estaba jugando con el mismo caballo que tenía desde la semana pasada. Le dije que teníamos que salir de ahí, pero ella no quería, le dije que era peligroso quedarse en la casa, y entonces empezó a gritar con una voz muy aguda y desesperante. Así que la tome de la cintura y trate de salir de la casa, pero tenía el cerrojo trabado. Lucy seguía gritando y llorando, y ahí estaban los mismos ojos diabólicos que vi la semana pasada. Me sentía aterrado, así que la senté en el sillón de la sala, para calmarla y tratar
de que esos ojos desaparecieran.
Entonces recordé que cuando le di su regalo de cumpleaños se había tranquilizado, así que le enseñe la mariposa que le había regalado, pero no pasaba nada, ella seguía gritando y llorando. Solo la podía mirar a los ojos, y hablarle y pedirle que dejara de llorar. Y entonces, callo. Pero me seguía viendo con esos ojos diabólicos que solo me tenían aterrado. Le dije que debía volver en sí, que no la quería perder, pero lo peor, ocurrió. Comenzó a sangrar la boca y a alargar sus brazos hacia mi cara, como si me quisiera arrancar los ojos de la cara, y me aleje, pero ella todavía quería arrancarme los ojos. Entonces recordé a mis padres, y al caballo. Ninguno de ellos tenían ojos, y entonces todo estaba más claro, ella había asesinado a nuestros padres. Ella ya no era mi hermana. Era un ser maligno y sanguinario que solo quería hacerme daño. Recordé que mi padre tenía una pistola en el cajón, así que la saqué la cargué y me dispuse a dispararle a mi hermana, pero, no pude. Ella seguía queriendo arrancarme los ojos de la cara y por lo tanto, asesinarme. Pero estaba petrificado, y no era capaz de dispararle a mi propia hermana. Y de repente ella dijo algo, pero no le entendía, y empezó a sollozar, y los ojos se le volvieron esos ojos verdes hermosos que siempre le había visto. Pero todavía estaba con la intención de matarme. Entonces repitió lo que me había dicho hace un momento. Y me dijo que la matara, yo no sabía porque había dicho eso, pero le dije que no lo podía hacer, que haría lo que fuera para salvarla y sacarle ese demonio que tenía en su interior, pero ella dijo que ya no podía hacer nada. Me rogó que la matara, así que le coloqué el cañón de la pistola en la frente, pero no me atrevía a jalar del gatillo. Mi hermana me susurraba que disparara, pero seguía trabado en llanto, que me perforaba el alma, me rogaba que disparara. Yo solo estaba llorando y viéndola que tenía los ojos perdidos de nuevo, y me dijo que disparara de nuevo y luego, solamente grito muy agudamente con los mismos ojos diabólicos de hace rato y no me quedo otra que dispararle. La sangre cubrió todo el sillón de la sala, y solo me quede en un silencio profundo, que me perforaba el alma como un enorme clavo de hierro. 10 minutos después llego la policía. Ellos pensaron que yo había asesinado a mis padres, pero no podía dar pruebas de que mi hermana había sido la asesina. Ahora me encuentro en la cárcel con pensamientos vagos de que pude haber hecho para salvar a mi pequeña hermana menor. Que podía hacer para quitarle esa mirada, esa oscura mirada que se me ha quedado grabado desde ese día, ese sombrío día, en el que toda mi familia, había muerto. Y en el que por primera vez en mi vida, había visto, los ojos del diablo.

HellBook, el inicio de las páginas

Era casi mitad del año 2004, aún no se sabe con exactitud lo ocurrido; la evidencia de aquel suceso ha sido borrada totalmente, o al menos así se cree.

Muy poco se conoce de esta historia. De los millones de usuarios que se encuentran registrados en esta enorme red social, sólo unos cuantos conocen el rumor.

Se dice que cuando el Boom de las páginas se puso de moda, existió una llamada «HellBook» que promovía contenido relacionado al gore. La página que se había creado un 6 de junio de 2004 creció rápidamente, llegando a los mil likes en menos de un día.

El objetivo de la página nunca fue claro, y contaba con apenas cuatro administradores:

—Andrea (creadora y encargada de la publicidad);

—Zower (encargado de las imágenes gore);

—Pablo (no se conoció qué cargo tenía, pero era entre publicidad, videos y publicaciones gore);

—Mikhail (escritor).

Después de permanecer exitosamente seis meses vigentes, se convirtió en una de las páginas principales en los temas que trataba. Sin embargo, y a pesar de atraer más de cien mil seguidores, la página desapareció de súbito. Se pensó que había sido finalmente clausurada por los creadores de Facebook, puesto que recibía denuncias constantes sobre las imágenes explícitas que publicaba.

Pronto, varios de sus seguidores empezaron a crear páginas similares tratando de emular a sus administradores, con poca suerte. Alguno llegó a difundir capturas de imagen de HellBook mostrando el sadismo que se ilustraba en cada una de sus publicaciones; pero rápidamente las imágenes relacionadas fueron eliminadas.

Hubo un momento en el que se desató un rumor sobre la procedencia de las imágenes: se dijo que la creadora, Andrea, publicó un grupo que llevaba el mismo nombre, en el que se invitaba a los usuarios a unirse con la única condición de no mencionar el grupo en otras páginas. Dentro de éste se compartía imágenes y vídeos Snuff, en los que habían estado involucrados dos administradores.

Otro rumor era que el escritor, Mikhail, usaba estos sucesos para poder crear sus historias; de allí vendría su pequeño texto al final de sus creaciones «Basado en hechos reales».

Tres meses después, un joven colombiano de dieciséis años, mediante su propia página, aseguró que había sido uno de los administradores de la desaparecida HellBook, afirmando en una de sus publicaciones que el cierre de la página se debió por la falta de tiempo de los administradores:

«Puedo decir que sí, alguna vez pertenecí a su página, pero no compartía los gustos que ellos tenían. Inclusive en una ocasión discutí con la creadora —Andrea— sobre las publicaciones gore, que ya eran cada vez más fuertes. Siempre intervenían los otros justificándose con que todo era para ganar likes. Luego, y a pesar del éxito de la página, se echaron para atrás. No quisieron seguir con el proyecto, simplemente no querían continuar, diciéndome que se debía a falta de tiempo, cosa que no les creí ya que siempre estaban conectados. Luego vino el cierre y por último me eliminaron de sus contactos. Así acabó la “era HellBook”.

—Morales».

Los antiguos seguidores de HellBook no demoraron en rechazar tal declaración asegurando que ésta fue sólo para ganar popularidad, llenando de inmediato el muro de la página de comentarios ofensivos para el administrador.

En el año 2008, luego de cuatro años de ausencia, una página bajo el nombre de «Infected H.» aparecía en las redes sociales. Casualmente el nombre de los administradores coincidían con aquellos de HellBook, con la diferencia de que las publicaciones trataban sobre temas paranormales, de ocultismo y música (Metal).

La página llamó la atención de muchos cibernautas, no sólo por el tipo de publicaciones que tenía, sino por el rumor que se tejía sobre los administradores. Una vez más, los administradores tuvieron una acogida rápida por sus seguidores hasta el punto de igualar su antigua página; sin embargo, Andrea, Zower, Pablo y Mikhail negaron en repetidas ocasiones estar relacionados a HellBook.

«Puedo asegurarles, que ni soy escritor, ni pertenecí a aquella página. Si me puse este nombre fue por el juego Resident Evil, sólo por eso; es más, ni siquiera sabía que existió esa página, así que ya déjense de estupideces, que estamos recibiendo muchas denuncias del Face’  por publicaciones que ni siquiera hicimos.

—Mikhail».

Después de aquel mensaje la página desapareció sin dar más explicación.

La última aparición registrada por parte de los administradores fue en el año 2012, bajo el mismo nombre, HellBook, pero con una menor aceptación, casi pasando inadvertidos.

Todos los hechos e historias que se formaron sobre los administradores y la página fueron prácticamente silenciados, y los pocos usuarios que se atreven a afirmar la existencia de esa página terminan siendo bloqueados por Facebook.

Actualmente no se conoce el paradero de ninguno, pero aún se rumorea que el administrador «Mikhail» circula en algunas páginas, contando ciertas historias que posiblemente sean reales.

«Detrás de toda historia hay una pequeña verdad. Detrás de todas mis líneas hay un poco de maldad. No soy Santo, pero tampoco enfermo, sólo busco inspiración; y si la vida de unos cuantos es el precio de la imaginación, sin dudar las ofrecería para crear mi propio mundo de ficción.

—Mikhail».



martes, 16 de julio de 2013

La Asesina de Porcelana

Hace mucho tiempo existió una niña llamada Yaiza. Ella era rubia y siempre iba peinada con dos trenzas. Tenía 9 años. El 3 de Abril de 1876 hizo su primera comunión. Su madre le regaló una muñeca de porcelana vestida de comunión que tenía una vela en la mano. En la espalda tenía un que al pulsarlo la muñeca cantaba y movía la vela a la que se le encendía la luz. A la niña le encantó y la colocó en una estantería que tenia en frente de su cama. Esa misma noche, a las tres de la madrugada, se escuchó a alguien cantar. Yaiza se despertó de un sobresalto y vio una luz naranja que se movía en medio de la oscuridad. Recordó que era la muñeca y fue a encender la luz para pararla pero cuando se volvió la muñeca no estaba. Un escalofrío recorrió su cuerpo y el miedo invadió su mente pero tuvo el valor suficiente para buscarla. La buscó en el cajón de su mesita de noche, detrás de los libros, pero no estaba. Entonces escuchó un ruido debajo de la cama y cuando fue a mirar... ¡ahí estaba la muñeca!Tenía un ojo y el traje rotos y la miraba con cara de querer atacarla. En mitad de la noche se escuchó un grito y el silencio reinó de nuevo. A la mañana siguiente sus padres fueron a despertarla y cuando entraron en su habitación se la encontraron muerta en la cama y la muñeca había desaparecido. A su madre le afectó tanto su muerte que cayó en una depresión y todas las noches veía reflejado el espíritu de Yaiza en las escaleras y se ponía a hablar con ella. Nunca supieron quién la mató ni dónde estaba la muñeca.

Eternamente bella

Veo como se le saltan las lágrimas mientras me mira con esos preciosos ojos grises. Aunque ahora están un poco desorbitados, debe ser el pánico, el miedo a saber la verdad: que no le queda mucho tiempo.

Ya no ríe como lo hacía mientras bailábamos en la disco, se veía estupenda con su top y sus vaqueros ajustados. Con ese cabello largo y oscuro enmarcando un rostro angelical donde sus ojos daban un toque de picardía, pero con pequeños rastros de ingenuidad.

Sus ojos son especiales, preciosos, una maravilla, de hecho son lo que me hicieron elegirla.
Cualquier tío la desearía, incluso muchas tías, pero yo no, soy una chica a la vieja usanza, me gustan demasiado los chicos para pensar en pasarme al otro lado.

No, yo no la deseo así...la deseo muerta; pálida, inerte como una muñeca de porcelana.
No estoy loca, sólo llena de envidia. Llevo demasiados años cuidándome para mejorar mi físico y no estoy dispuesta a que la primera monada que se presente me quite el puesto de diva.

Aunque he de reconocer que es guapa, muchísimo, incluso más que yo, y por eso no voy a permitir que siga por ahí meneando el culo delante de mis posibles amantes.
Pobrecilla, su miedo llega incluso a enternecerme, pero lo siento por ella, no aguanto la competencia. De todas formas no quiero estropearla así que no sé cómo voy a hacerlo.

¡Ah, ya lo tengo! la asfixiaré, así no le quedará ninguna fea marca, ni esas asquerosas manchas de sangre que estropean tanto la estética de la muerte, y es que algunos no sienten respeto ni tan siquiera por eso. ¡Malditos locos!

Es curioso lo que puede llegar a confiar una chica en una amiga, nunca se habría imaginado lo que la esperaba cuando la invite a casa, no puedo creer que fuera tan inocente.
Pero es tan guapa...incluso con la palidez que se ha adueñado de su piel y su mirada vacía sigue siendo bella. Eso sí, ahora no más que yo.

Audio de Slenderman año 1989

lunes, 15 de julio de 2013

El Hombre De Negro

“Y como siempre, allí estábamos los de siempre, haciendo lo de siempre. Sentados en la oscuridad, alejados de todo aquel que solo quería imponernos algo. Todos hablábamos, reíamos, bebíamos y todas esas cosas que haces con los amigos.

Cuando mejor lo pasábamos, Carol, mi mejor amiga empezó a llorar mientras gritaba que en el fondo en la oscuridad había alguien que vestía de negro y estaba tan pálido (o al menos eso vio) que parecía un muerto. Todos comenzamos a reírnos y le dijimos que dejara de beber. Ella insistió.


Dos de los chicos que estaban con nosotras se ofrecieron a acompañarla hasta el sitio para que se convenciera de que allí no había nada ni nadie. Al final fuimos todos. Llegamos, miramos por todas partes y, como habíamos pensado, no había nada; mejor dicho, nadie.

A Carolina se le pasó el susto. Volvimos a crear el ambiente que teníamos, cuando vi algo: era ese hombre, el de negro. Me entró tal miedo que comencé a gritar. Los chicos pusieron cara de mosqueo y nos empezaron a decir que la broma había estado muy bien pero que paráramos, que se estaba haciendo pesada. Nosotras no dejábamos de decir que aquello no era una broma, que habíamos visto a aquel hombre o lo que fuese.

Después de un rato decidimos quedarnos allí un poco mas, pero esta vez cambiamos los sitios.
Cuando mas a gusto estábamos, uno de los chicos, Juan, le dijo a otro que mirase al fondo. Este se levanto y dijo gritando ¡¡¡¡CORRED!!!!

No tuve tiempo a girarme y mirar, pero se lo que vieron. ¡¡¡SI!!! Se que habíamos bebido, y también se que cuando se bebe se puede llegar a ver cosas que en realidad no están pasando pero en este caso lo vimos cuatro personas. No volvimos a aquel sitio nunca mas.”
Leyendas de terror

La Leyenda la Calle de las tres cruces

La casa de Don Diego de Gallinar, alzaba orgullosa sus tres pisos, junto a las humildes casitas de uno solo, que empezaban a formar la calle que prolongaba la de San Francisco y la cual desembocaba en la plaza principal. Don Diego era tío y tutor de la bellísima Beatriz Moncada, quien acababa de salir del colegio donde se educaba y tenía que vivir bajo la severa custodia de su tío. Se rumoraba que el señor de Gallinar tenía planeado casar a su sobrina con Don Antonio, su único hijo, que por esas fechas andaba en servicio con el señor Márquez de la Laguna, combatiendo a los piratas, que rondaban y acechaban el puerto de Veracruz y que era un joven calavera que derrochaba el dinero a manos llenas, se decía que una de las razones para llevar a cabo ese enlace era que una vez casada Beatriz con el señor Antonio, el señor Gallinar no tendría que dar cuenta a nadie del patrimonio de la rica heredera, a quien tenía más como presa en su lujosa casona.

Desde hacía algunas noches, que al dar las doce campanadas, se es cuchaban las notas dulces de un violín tocado por un joven desconocido, que apoyado en el poste de un farol que alumbraba débilmente la desierta calle, arrancaba a su instrumento melodiosos himnos de amor. El músico era un joven indígena, recogido y educado por los religiosos del convento de San Agustín, que le habían enseñado las artes y ciencias que ellos sabían.

Su nombre era Gabriel García, y Beatriz lo conoció en un concierto de la casa del Conde de San Mateo; pues debido a las buenas referencias que le daban los religiosos a Gabriel, era éste admitido en todas las reuniones de la aristocracia de aquel entonces. Beatriz lo oyó tocar y su alma vibró el compás de la maravillosa música del artista, y una elocuente mirada sirvió para le entregara el corazón. El músico que estaba subyugado, por la hermosura peregrina de aquella niña rubia, comprendió el mudo lenguaje de sus miradas y la adoró con todas las fuerzas de su alma india; aunque sabía que era un amor sin esperanza.

Desde entonces, todas las noches al filo de la media noche, iba Gabriel frente a la casa de su adorada a desahogar su corazón por medio de su música dulcísima. Beatriz burlando la vigilancia de su dueño subía al mirador encristalado para escuchar a su amado. Mas una noche, la fatalidad del destino tendió sus redes; Don Diego se retiraba más tarde que de costumbre, y se encontró con el concierto frente a su casa; a la luz del farol reconoció inequívocamente a Gabriel.

Ciego de ira, le ordeno que se retirase antes de que lo apalearan sus sirvientes; Gabriel contestó que se retiraba porque tenía que hacerlo, y no por miedo a los palos, pues no era ningún perro y sabía defenderse con la espada en la mano como un caballero; pero viendo el ademán de sacar la espada de Don Diego, le dijo que con él no se batiría porque lo respetaba demasiado. El señor de Gallinar, loco de rabia, le lanzo los peores insultos llamándolo indio mal nacido, aventurero y cobarde seguidos de una bofetada. Gabriel no aguantó más y arrojando su violín en medio de la calle desenvainó su espada y se puso en guardia con el propósito de defenderse sin agredir a su agresor.

La lucha fue reñida por parte de Don Diego que quería toda costa acabar con su adversario, ya que Gabriel solo se limitaba a parar los golpes, cosa que irritaba más y más al viejo. Viendo que la lucha se prolongaba sin conseguir su propósito, el señor de Gallinar, quiso dar la estocada final y se tiró a fondo, clavándose en la espada de Gabriel que solo guisó desviar la mortal estocada, Don Diego se desplomo lanzando una horrible blasfemia; y dejando ver así que se le escapaba la vida.

Gabriel horrorizado se arrodillo a socorrer al moribundo; cuando se abrió el portón de la casona y salió un criado del señor de Gallinar que había presenciado la lucha, al ver a su señor herido de muerte y a su agresor inclinado ante él, sacando un puñal del cinto se lo clavó a Gabriel en la espalda y corrió a esconderse dentro de la casa.

Entonces se oyó un alarido de agonía, seguido del estrépito de cristales rotos: Era que Beatriz, mudo testigo de estas horribles estas escenas, se había desmayado y su cuerpo, falto de apoyo, rompía los cristales del mirador, para caer y estrellarse en las piedras de la calle, junto con el violín del amado.

Cuando la ronda llegó al lugar de la tragedia, encontró a la débil luz del farol a los tres cadáveres, una mano piadosa, marcó con tres cruces de cal los lugares donde fueron encontrados los tres cuerpos.
Desde esa fecha 2 de Noviembre de 1763 se llamó: LA CALLE DE TRES CRUCES La cual actualmente se localiza exactamente en donde termina la avenida Hidalgo y comienza la calle Juan de Tolosa, un poco más allá del palacio de gobierno del estado y con dirección a las lomas de Bracho.

La leyenda de la Santa Compaña

Poco después de la medianoche, en las afueras de un pueblo español, un tal Dr. Pereira que regresaba a casa después de asistir a un nacimiento. De repente, deslizando por delante, vio a ocho monjes y encapuchados con una palidez fantasmal y una persona que lleva una gran cruz de madera, mientras que un fuerte olor a velas se extendía en el aire. El grupo se detuvo en la puerta de la herrería, Pereira corrió a su casa. Después de cuatro días, el herrero tenía un ataque al corazón en su casa. Este hecho le sucedía a cientos de personas que afirmaban haber visto a La Santa Compañía, una procesión de los “fantasmas” que se dice que habita en una zona rural de Galicia, una región en el noroeste de España conocido por sus cuentos de brujas y su interés por los muertos. Aunque la leyenda se ha extendido por todo el norte de España y Portugal, La Santa Compañía tiene un carácter particularmente gallego. Está estrechamente relacionada con los cruceiros (cruceros) a lo largo de las carreteras existentes – viejos cruces donde se dice que la procesión pasaba.

La procesión sombría de cinco o más monjes encapuchados, en los refugios de las callejuelas solitarias y los cementerios alrededor de la medianoche y se tomaba siempre como un presagio de muerte a quien la veía. Algunos parapsicólogos teorizan que tales apariciones podrían inconscientemente ser diseñadas por alguien que tiene una premonición de muerte. Los sociólogos y antropólogos proponen explicaciones pragmáticas, lo que sugiere que la luz de las linternas, junto con la niebla, la lluvia y los bosques densos, puede haber dado origen a esta leyenda. O tal vez los testigos no han visto fantasmas, pero los grupos de traficantes o incluso mariscadores, común en esta región que se habían reportado desde la instalación de la electricidad, los investigadores Magdalena y Fernando Javier Akerman recogen muchos informes recientes apariciones de este grupo siniestro. La Santa Compaña está tan arraigada en el folclore que pueda ser vista en las carreteras solitarias y brumosas en tiempos más cercanos en Galicia.
Leyendas de terror

sábado, 13 de julio de 2013

La penumbra de la costa

Día soleado, ¿no? Usted huele el aire, con esa fragancia a sal y sol tan característica de las ciudades portuarias; se goza en los cálidos rayos del sol, en la caricia de la brisa caliente. En sus genes no está el instinto que tenemos la mayoría de los marplatenses corriendo en nuestras venas.

Desde la fundación de la ciudad, los habitantes de ésta siempre tratamos, subconscientemente, de alejarnos del mar: en el verano solemos despreciar la belleza de la costa y a los turistas que se acercan tan negligente y despreocupadamente a ella. Hay quienes dicen que es una simple cuestión de turismo, pero algunos ancianos dan otras explicaciones, sentados alrededor de una fogata o en la sobremesa de algún asado.

Estos ancianos, casi siempre marineros o trabajadores portuarios en épocas pasadas, relatan escalofriantes historias sin que se les mueva un músculo en sus caras talladas por el salitre. Alguno más atrevido quizá muestre una cicatriz para dar fuerza a su historia; si usted tiene la suerte o la desdicha de escuchar la historia —casi siempre totalmente inverosímil— de alguno de estos veteranos y éste le muestra alguna herida, muy difícilmente identificará la forma o procedencia de la cicatriz.

Los visitantes de nuestra ciudad no poseen ni adquieren el instinto acerca de lo que se oculta en el mar; a veces ni siquiera los que se mudan por largos periodos de tiempo a nuestro lugar desarrollan esa sensibilidad especial respecto al mar que caracteriza a los nacidos en Mar del Plata.

¿Conoce la historia de Alfonsina Storni? Quizá alguno de estos viejos lobos de mar se la cuente, pero con exageraciones y detalles morbosos que están fuera de lugar y consideración. Muchas teorías circulan acerca de su —a primera vista— peculiar suicidio adentrándose en el mar, y sin embargo mucha gente de esta ciudad eligió o elige esa forma para acabar con su vida. Cuando la sensibilidad acerca del océano y sus oscuros misterios es extrema, el sujeto comienza a investigar de manera enfermiza, y según las malas lenguas, a tener alucinaciones y delirios místicos con antiguos seres venidos desde las profundidades marítimas.

Esas personas, como la poeta Storni, desarrollan una ligera pero malsana esquizofrenia. Otra anécdota trágica es la de Lucien Andreaux, poeta francés radicado en Mar del Plata desde los 15 años. El europeo asesinó a mano limpia a dos comerciantes del puerto que pertenecían a la misma familia, la cual, casualmente, tenía una fama siniestra en la ciudad debido a su pertenencia a cierto culto esotérico. Cuando la policía lo llevó, preso de una alucinación mezclada con emoción violenta, el asesino sólo atinaba a formular una explicación fantástica sobre los fundadores de la ciudad, como Peralta Ramos o Luro, teniendo descendencia con repugnantes criaturas que vivían cerca del puerto. En la irracional historia del francés, que fue escuchada por varios transeúntes, la ciudad estaba corrompida por estos seres del mar, y él había hecho un bien en matar a dos. El francés se suicidó tres días después en su celda de manicomio: el dato curioso es que los peritos encontraron pequeñas escamas, casi invisibles a simple vista, alrededor de su cuello.

La historia de Andreaux nunca pasó de ser un rumor; en ningún diario de ese año se menciona la noticia. Esta truculenta anécdota es conocida por un casi nulo porcentaje de los marplatenses, y descreída por la mayoría de los que la conocen.

Sin embargo, la historia del francés puede y ha sido verificada con cierto esfuerzo y espíritu investigativo. Es más: si uno mira atentamente a ciertos comerciantes del puerto, verá que comparten algunos rasgos para nada tranquilizadores, como los ojos saltones y los gruesos y boqueantes labios. Los más paranoicos dicen haber visto a algunos de ellos saltando al mar en ciertas noches de luna nueva y también practicando danzas arcaicas en recónditas playas del sur. Huelga aclarar que estos dichos no son en absoluto de fiar y, de hecho, somos los menos los que les prestamos atención.

A pesar de todo, la modernidad y el progreso de la urbanización terminaron por tapar casi del todo estas leyendas en capas de cemento y asfalto. Ciertos periodistas olvidados han comparado los extraños e ignorados sucesos de Mar del Plata con los de la ya fantasma ciudad de Innsmouth en Estados Unidos. A veces, misteriosas corrientes marítimas que no deberían existir arrastran a turistas hasta las entrañas del océano: hace unos años se encontró un cadáver de uno de estos en una playa del sur, con el rostro desgarrado y extrañas marcas similares a runas en el pecho. La noticia fue tapada igual de rápido que lo que tardó la policía en incinerar el cadáver, pero algunos policías aflojaron la lengua bajo los efectos del alcohol en ciertas cantinas de mala muerte, aunque es la opinión popular que estos agentes todavía se callaban detalles peores.

Muchos y horrendos son los rumores que corren entre marineros e intelectuales de la ciudad. La mayoría de los habitantes ni siquiera los conoce, pero casi todos tienen, en el fondo, una mezcla de pavoroso respeto y religioso temor al oscuro atlántico. Luces extrañas bajo el agua, cadáveres ocasionales y sombras nadadoras en noches puntuales del mes ayudan a fomentar las habladurías y forman parte de un oscuro folklore de pocos; pero no se preocupe, probablemente usted tenga una buena experiencia en la ciudad. Eso sí, cuando el cielo se torne plomizo, el viento corra frío y el mar se embravezca, tenga mucho cuidado con el mar. Y cuando esté soleado, quizá debería estar atento.

A los marplatenses no nos gusta el mar.

miércoles, 10 de julio de 2013

El Gato sin Ojos

Antes de empezar mi tarea prefiero dejarlos con una buena historia que encontré hace algunos días, y que no había podido publicar debido a que mi internet no está funcionando muy bien últimamente. Pero aquí estoy de nuevo, ésta vez con una historia titulada “El Gato sin Ojos”:

“Escribo porque no tengo nada mejor que hacer, porque necesito que sepan la verdad y porque es lo único que él me deja hacer.

Lo que ocurrió es tan bizarro, paranormal e ilógico que no podría imaginar que mucha gente crea lo que estoy por contar. Soy un escritor de una editorial muy exigente, justo había terminado una buen libro de auto superación, pero tenía errores y me habían obligado a corregirlos para entregarlo de nuevo una semana después.

Siempre fui un amante de los animales y no estoy en mi ciudad natal, vine porque en esta ciudad esta el plantel principal de la editorial, solo estoy de viaje y vengo de lejos, no pude traer mis mascotas por lo largo del viaje, estoy en un pequeño departamento sin compañía, iba directo a una tienda de mascotas para conseguir un compañero temporal, y no sentirme solo mientras estaba encerrado arreglando los pequeños errores del libro

Camino hacia el lugar me tope con un gato que no tenía ojos. Extrañamente no me dio miedo, incluso me dio lástima, así que decidí tomarlo. Justo ahora me arrepiento de haberlo hecho.

Lo llevé a revisar a con un veterinario para ver que no tuviera algo grave, solo tenía una pequeña infección en la pierna, pero apenas estaba emergiendo, así que fue fácil erradicarla. En la sala del veterinario era fácil notar que yo era el único al que no le daba asco la situación del gato, nunca le puse nombre, tanto por que no me dio tiempo, como que todavía no me quería encariñar tanto con el.

Una vez en casa lo dejé que jugara libre por el apartamento. A pesar de estar ciego parecía saber exactamente donde estaba y como moverse por el lugar, no me pareció extraño, solo pensaba en lo prepotente que se habría de sentir el pobre animal.

Mientras él jugaba, yo comencé a corregir los primeros errores del libro en mi laptop. Inmediatamente me fui a dormir, todo normal, fue a la mañana siguiente cuando todo comenzó.

Créanme o no, cuando desperté, había frente a mi (yo volteando directamente al techo) un hombre viéndome a los ojos, parado a un lado de mi cama, o eso creía que hacía, pues ese hombre no tenia ojos con que verme, solo veía un par de cuencas vacías. Grité como cualquier persona normal lo haría, estaba paralizado, en eso el hombre se deja caer al piso para andar a cuatro patas, se acurruca en una esquina, saca de su bolsa una libreta con una pluma y comienza a escribir.

Tuve la fuerza de levantar la cabeza, el hombre no reaccionó, poco a poco me levanté, aprovechando lo concentrado que estaba él en su libreta, me acerqué a la puerta y la intenté abrir. Tenía algo abajo que lo atoraba; intenté sacarlo, cada vez con más desesperación y sin ningún efecto positivo. Me acerqué a la ventana, estaba tapizada de mucho papel de libreta, era la base en la que había comenzado a escribir mi libro, apenas pocos rayos de luz entraban, lo suficiente para iluminar la habitación. Intenté quitarlos pero parecían estar perfectamente aferrados a la ventana, la golpeé sin un buen resultado.

Volteé y desde su esquina el hombre me estaba observando fijamente, con la fuerte oscuridad interna de sus ojos. Con mucho miedo y temblando demasiado me esforcé en preguntarle: “¿quien eres?, ¿qué quieres de mi?” recibí un fuerte maúllo a cambio, me hizo pensar un poco y busqué un poco en el cuarto, aun temblando y con su mirada inexistente, fija y penetrante encima de mi. No veía al gato ciego en ningún lado; entonces lo noté: aquello que tanto me observaba era mi gato

Al notar que me había dado cuenta de lo que ocurría, el se me acercó, yo desesperado intentaba alejarme de el en vano, y se arrulló conmigo ronroneando, a estas alturas yo estaba a punto de llorar. Cuando vi que se durmió, intenté pensar alguna solución, en ese momento no pude hacer nada, pues si me movía seguro el se despertaría, sin saber como ni porqué, caí dormido.

Desperté y el estaba de nuevo en su esquina escribiendo en su pequeña libreta, esta vez volteando hacia mi varias veces para luego continuar escribiendo en su libreta, me levanté, esta vez con mas confianza porque noté que él no planeaba hacerme daño. Me dió hambre, entonces volvió el pánico de nuevo, estaba encerrado en mi propia habitación, no podía salir a la cocina, no tenía que comer. Mientras pensaba esto escuché un pequeño crujido, era el estómago del gato: los dos volteamos al mismo punto, su panza, luego él me volteó a ver a mí, sin nada que hacer, y yo con los nervios de punta por su mirada oscura tan penetrante le dije un poco tartamudo: “no puedo salir a la cocina, solo si me dejas salir podremos comer” al oir esto me observó por dos segundos más y volvió a su libreta, pensé y busqué soluciones, no había ninguna, estaba y sigo encerrado aquí, con él.

Solo pude pensar en una cosa, en un solo plan: que me rescataran, en menos de una semana la editorial notaría que no aparecí, intentarían contactarme, no respondería, hablarían a la policía e irrumpirían aquí, si el gato pudo volverse humano, o humanoide, o lo que quiera que sea eso, podrá volver a lo que antes fue, entonces parecerá que simplemente me encerré yo solo aquí, y el gato saldrá inocente y atrapará a alguien más. En este momento comienzo a escribir esto, para que cuando entren aquí y me vean muerto de hambre, lean esto y se encarguen del maldito gato.

Han pasado tres días de lo último que escribí, muero de hambre y parece ser que él también, pero no hace nada, sigue escribiendo, sigue observándome, pareciera que me analiza, soy su experimento, soy su muñeco de prueba, ¿Qué quiere de mi?, ¿por qué hace esto?, ¿no fui al único al que se lo ha hecho?, quiero salir de aquí, quiero que ese gato se aleje de mi, no le puedo hacer nada, no cambiaría nada, seguiré atrapado aquí si lo mato, debo seguir su juego, terminar su prueba, quizás así me deje salir, quizás así quede en libertad, solo debo esperar, dejarlo a él terminar, no preocuparme y seguir tranquilo, estoy al borde de la locura, ayuda por favor, AYUDA, AYÚDENME, NO QUIERO SEGUIR AQUÍ, AYUDA!”

Texto encontrado junto a un cuerpo dentro del departamento, el cuerpo se encontró en la cama, sobre él un gato negro y sin ojos. Al cuerpo le faltaban partes de su piel, debajo de las manos habían restos de carne, y lo más espeluznante, parecía que alguien le había arrancado los ojos. Los policías antes de leer esto creían que el estrés había llevado al escritor al borde de la locura, para encerrarse el solo y alimentar a su gato y el mismo con su propia carne, el diario encontrado a un lado del cadáver dio a entender otra cosa. En cuanto los policías entraron al cuarto el gato volteó y los miró con la profunda oscuridad de sus cuencas vacías. Miró fijo a uno de los policías ahí presentes y extrañamente ese fue el único al que el pánico no poseyó, tomó al gato entre sus brazos mientras registraban el lugar. Al irse todos, y antes de que alguien pudiera leer el diario, ese policía se fue directo a su casa con el felino. Desde hace 4 días no se tienen noticias de él ni de su familia.”
Foto: El Gato sin Ojos

Antes de empezar mi tarea prefiero dejarlos con una buena historia que encontré hace algunos días, y que no había podido publicar debido a que mi internet no está funcionando muy bien últimamente. Pero aquí estoy de nuevo, ésta vez con una historia titulada “El Gato sin Ojos”:

“Escribo porque no tengo nada mejor que hacer, porque necesito que sepan la verdad y porque es lo único que él me deja hacer.

Lo que ocurrió es tan bizarro, paranormal e ilógico que no podría imaginar que mucha gente crea lo que estoy por contar. Soy un escritor de una editorial muy exigente, justo había terminado una buen libro de auto superación, pero tenía errores y me habían obligado a corregirlos para entregarlo de nuevo una semana después.

Siempre fui un amante de los animales y no estoy en mi ciudad natal, vine porque en esta ciudad esta el plantel principal de la editorial, solo estoy de viaje y vengo de lejos, no pude traer mis mascotas por lo largo del viaje, estoy en un pequeño departamento sin compañía, iba directo a una tienda de mascotas para conseguir un compañero temporal, y no sentirme solo mientras estaba encerrado arreglando los pequeños errores del libro

Camino hacia el lugar me tope con un gato que no tenía ojos. Extrañamente no me dio miedo, incluso me dio lástima, así que decidí tomarlo. Justo ahora me arrepiento de haberlo hecho.

Lo llevé a revisar a con un veterinario para ver que no tuviera algo grave, solo tenía una pequeña infección en la pierna, pero apenas estaba emergiendo, así que fue fácil erradicarla. En la sala del veterinario era fácil notar que yo era el único al que no le daba asco la situación del gato, nunca le puse nombre, tanto por que no me dio tiempo, como que todavía no me quería encariñar tanto con el.

Una vez en casa lo dejé que jugara libre por el apartamento. A pesar de estar ciego parecía saber exactamente donde estaba y como moverse por el lugar, no me pareció extraño, solo pensaba en lo prepotente que se habría de sentir el pobre animal.

Mientras él jugaba, yo comencé a corregir los primeros errores del libro en mi laptop. Inmediatamente me fui a dormir, todo normal, fue a la mañana siguiente cuando todo comenzó.

Créanme o no, cuando desperté, había frente a mi (yo volteando directamente al techo) un hombre viéndome a los ojos, parado a un lado de mi cama, o eso creía que hacía, pues ese hombre no tenia ojos con que verme, solo veía un par de cuencas vacías. Grité como cualquier persona normal lo haría, estaba paralizado, en eso el hombre se deja caer al piso para andar a cuatro patas, se acurruca en una esquina, saca de su bolsa una libreta con una pluma y comienza a escribir.

Tuve la fuerza de levantar la cabeza, el hombre no reaccionó, poco a poco me levanté, aprovechando lo concentrado que estaba él en su libreta, me acerqué a la puerta y la intenté abrir. Tenía algo abajo que lo atoraba; intenté sacarlo, cada vez con más desesperación y sin ningún efecto positivo. Me acerqué a la ventana, estaba tapizada de mucho papel de libreta, era la base en la que había comenzado a escribir mi libro, apenas pocos rayos de luz entraban, lo suficiente para iluminar la habitación. Intenté quitarlos pero parecían estar perfectamente aferrados a la ventana, la golpeé sin un buen resultado.

Volteé y desde su esquina el hombre me estaba observando fijamente, con la fuerte oscuridad interna de sus ojos. Con mucho miedo y temblando demasiado me esforcé en preguntarle: “¿quien eres?, ¿qué quieres de mi?” recibí un fuerte maúllo a cambio, me hizo pensar un poco y busqué un poco en el cuarto, aun temblando y con su mirada inexistente, fija y penetrante encima de mi. No veía al gato ciego en ningún lado; entonces lo noté: aquello que tanto me observaba era mi gato

Al notar que me había dado cuenta de lo que ocurría, el se me acercó, yo desesperado intentaba alejarme de el en vano, y se arrulló conmigo ronroneando, a estas alturas yo estaba a punto de llorar. Cuando vi que se durmió, intenté pensar alguna solución, en ese momento no pude hacer nada, pues si me movía seguro el se despertaría, sin saber como ni porqué, caí dormido.

Desperté y el estaba de nuevo en su esquina escribiendo en su pequeña libreta, esta vez volteando hacia mi varias veces para luego continuar escribiendo en su libreta, me levanté, esta vez con mas confianza porque noté que él no planeaba hacerme daño. Me dió hambre, entonces volvió el pánico de nuevo, estaba encerrado en mi propia habitación, no podía salir a la cocina, no tenía que comer. Mientras pensaba esto escuché un pequeño crujido, era el estómago del gato: los dos volteamos al mismo punto, su panza, luego él me volteó a ver a mí, sin nada que hacer, y yo con los nervios de punta por su mirada oscura tan penetrante le dije un poco tartamudo: “no puedo salir a la cocina, solo si me dejas salir podremos comer” al oir esto me observó por dos segundos más y volvió a su libreta, pensé y busqué soluciones, no había ninguna, estaba y sigo encerrado aquí, con él.

Solo pude pensar en una cosa, en un solo plan: que me rescataran, en menos de una semana la editorial notaría que no aparecí, intentarían contactarme, no respondería, hablarían a la policía e irrumpirían aquí, si el gato pudo volverse humano, o humanoide, o lo que quiera que sea eso, podrá volver a lo que antes fue, entonces parecerá que simplemente me encerré yo solo aquí, y el gato saldrá inocente y atrapará a alguien más. En este momento comienzo a escribir esto, para que cuando entren aquí y me vean muerto de hambre, lean esto y se encarguen del maldito gato.

Han pasado tres días de lo último que escribí, muero de hambre y parece ser que él también, pero no hace nada, sigue escribiendo, sigue observándome, pareciera que me analiza, soy su experimento, soy su muñeco de prueba, ¿Qué quiere de mi?, ¿por qué hace esto?, ¿no fui al único al que se lo ha hecho?, quiero salir de aquí, quiero que ese gato se aleje de mi, no le puedo hacer nada, no cambiaría nada, seguiré atrapado aquí si lo mato, debo seguir su juego, terminar su prueba, quizás así me deje salir, quizás así quede en libertad, solo debo esperar, dejarlo a él terminar, no preocuparme y seguir tranquilo, estoy al borde de la locura, ayuda por favor, AYUDA, AYÚDENME, NO QUIERO SEGUIR AQUÍ, AYUDA!”

Texto encontrado junto a un cuerpo dentro del departamento, el cuerpo se encontró en la cama, sobre él un gato negro y sin ojos. Al cuerpo le faltaban partes de su piel, debajo de las manos habían restos de carne, y lo más espeluznante, parecía que alguien le había arrancado los ojos. Los policías antes de leer esto creían que el estrés había llevado al escritor al borde de la locura, para encerrarse el solo y alimentar a su gato y el mismo con su propia carne, el diario encontrado a un lado del cadáver dio a entender otra cosa. En cuanto los policías entraron al cuarto el gato volteó y los miró con la profunda oscuridad de sus cuencas vacías. Miró fijo a uno de los policías ahí presentes y extrañamente ese fue el único al que el pánico no poseyó, tomó al gato entre sus brazos mientras registraban el lugar. Al irse todos, y antes de que alguien pudiera leer el diario, ese policía se fue directo a su casa con el felino. Desde hace 4 días no se tienen noticias de él ni de su familia.”