martes, 26 de febrero de 2013

En mi cama sobra un lugar


Realmente ya no recuerdo cuando la vi por primera vez, es hermosa, mi vida es perfecta con ella a mi lado… daría la vida por ella, daría lo que fuera para que ella no sufra… ella… salvó mi vida.

Todo empezó cuando tenía 20 años, mis padres salieron a cenar, celebraban su aniversario de bodas, y como era frecuente me desvelé esa noche. Mientras jugaba y chateaba en mi computadora, las horas se hacían cada vez mas cortas, el sol se reveló al mundo para darme a conocer que ya no dormí esa noche, y no vino solo, vino con un viento un poco fuerte, y una lluvia que cautivaba a no mirar la ventana.

Cuando ya hacían las 1 de la tarde, empecé a preocuparme del por que mis padres no llegaban, llamé a mi madre al celular… marcaba y marcaba, pero nadie contestaba. Pasaron 15 minutos, y llamaron a la red fija de mi casa, era un policía, “Hijo, siéntate, algo pasó ayer, eres el hijo de la señora Susy, ¿Cierto?, ok, necesito que vengas a la comisaría, debo informarte algo grave” Acá corta, y yo corriendo, me largué de mi casa,imaginando lo peor.

Unas horas mas tardes, supe que mi vida cambiaría para siempre, de alguna u otra forma…..yo era huérfano, y estaba solo en el mundo, los cuervos de satán, o los ángeles de Dios se habían llevado a mis padres, y yo no pude hacer nada, solo… me quedaba contar los minutos que faltan para que ellos vengan por mi.

Pasaron los meses, y tuve que estar en esa casa jodidamentesolo… lloraba cada noche, sobre como extrañaba el grito de mi madre hacia mi padre para que bajara el volumen al televisor, el como mi padre tocaba la bocina para que me apure y no llegue tarde a la universidad, todas estas cosas… ya no son nada mas que recuerdos, mi soledad se hacía inminente, me consumía de pies a cabeza, no tenía a nadie cercano en esa puta ciudad, nadie con quien… pudiera llorar y decirle cuanto deseo volver a sonreír sinceramente.

Y justo cuando pensaba, que mis días en esta tierra, estaban en cuenta regresiva debido a mi falta de voluntad por querer salir a adelante… un rayo de luz iluminó mi mente. O mas bien… la esquina de mi casa.

Un día, venía desde el supermercado, el cual queda muy cerca de mi hogar, y…vi a una chica, de mas o menos 19 años, la cual tenía una pérdida mirada, que representaba un ambiente de desorientación, y como no me llamó mucho la atención, decidí seguir de largo. Cuando pasé frente a ella…. Ella dijo mi nombre, con el mismo tono que una mamá podría decirlo, con el mismo tono que MI MAMÁ pudo decirlo, como me lo decía, como nunca más me lo dirá… esa suavidad en su voz, fue muy agradable, me hizo sentir familiar, no tenía que gritar para que yo escuche, mi mente quedó clavada en su primera palabra… Fui hacia ella, y le pregunté que necesitaba, ella respondió así: -“¿Yo necesitar algo?, tu me necesitas a mi”, entonces tomó mi mano, y me llevó a mi casa. Yo no dije nada, estaba atónito, quizá era una broma, pero por dentro, yo sabía que algo sucedía. No me fijé mucho en su ropa, ni su cara, solo… en como me hablaba y me hacía sentir.

No le pregunté que hacía aquí, ni como sabía donde vivía… solo le pregunté quien era, me respondió: “Me llamo Cinthia… te estaba esperando”, luego de eso, puso una sonrisa con ojos cerrados, la sonrisa mas confiable que había visto en mi vida. En ese momento me di cuenta que era hermosa, que su blanca piel era tan pura como su voz, su cabello caía como una cascada en armonía con canto de pájaros en primavera…. Me enamoré en seguida. Le dije que no sabía que esperaba de mí, no tengo deberes con nadie, solo conmigo, a lo que respondió una sencilla frase que calmó todas mis dudas: “Yo soy parte de ti”, se acercó, y me besó…yo la abrasé, ella dijo que no temiera, que estaría bien, y volvió a darme un beso.

Desde ese día, que todas mis preocupaciones se calmaron, volví a querer a alguien, alguien que pudo hacer más cosas que la misma muerte, alguien que finalmente le ganó a mi sufrimiento. Con ella iba a todos lados, la tomaba de la mano, hicimos el amor muchas veces, teníamos una casa para nosotros solos, era mi completa felicidad. Ella no come, ni se ducha, siempre está limpia, no se como lo hace, pero no importa, si ella dice que está bien, así será. La gente en la calle, de alguna forma siempre nos miraba, cuando paseábamos, y por sobre todo, cuando la besaba en la entrada de la casa, quizá porque es hermosa, o porque no esperaban a que yo progresara luego de tal incidente.

Muchas veces pensé en suicidarme, pero no tenía los cojones, ahora solo lo haría si ella me pidiera hacerlo.

Un día, mientras mirábamos tv, un señor golpeó la puerta, yo lo invité a pasar, pero declinó. Luego de su negación, un grupo de gente entró a mi domicilio, me tomaron para luego drogarme, con el fin que yo cayera inconsciente.

Y ahora estoy aquí, en un cuarto blanco sin salida, en el cual escucho voces de gente que no conozco, gente que dice que tengo un problema, que si no dejo de verla no me sanaré, que si sigo haciendo el ridículo no saldré nunca más de aquí… pero la verdad, no importa, al parecer ellos no han visto a Cinthia escondida bajo mi cama, con ella nunca me sentiré solo de nuevo, y no podrán hacer nada para quitármela.



Atentamente, texto de un esquizofrénico.

.

No hay comentarios:

Publicar un comentario